En el entorno empresarial actual, se está avanzando hacia la digitalización a través de la implementación obligatoria de la factura electrónica. Esto significa que los profesionales ya no podrán limitarse a la emisión de facturas en papel, sino que deberán adoptar el formato electrónico.

Esta nueva normativa impacta a todos los autónomos y empresas en España, quienes deben adaptarse a las disposiciones de la Ley Crea y Crece dentro de los plazos especificados.

 

La normativa de facturación electrónica fue inicialmente introducida por la Ley 56/2007 y ampliada por la Ley 25/2013, que exigía la factura electrónica para transacciones superiores a 5.000 euros entre empresas y el sector público. La consolidación de esta norma llegó con la Ley de Creación y Crecimiento Empresarial, aprobada el 28 de septiembre de 2022, que establece en su artículo 12 la obligatoriedad para todas las empresas y autónomos de emitir y enviar facturas electrónicas en sus relaciones comerciales.

 

La transición hacia la factura electrónica será gradual, con diferentes plazos para su implementación:

  • Empresas que facturan más de 8 millones de euros tendrán 12 meses desde la entrada en vigor del reglamento de facturación electrónica, lo que posiblemente haga obligatorio este sistema a principios de 2025.
  • Para empresas y autónomos que facturen menos de 8 millones de euros, la obligatoriedad comenzará dos años después de la entrada en vigor del mismo reglamento, indicando un posible inicio a principios de 2026.

 

Los beneficios de esta nueva ley son significativos

  • Reducción de la morosidad: Facilita el seguimiento de facturas y sus plazos de pago, reduciendo los retrasos.
  • Pago a tiempo: Se espera que los autónomos mejoren su liquidez recibiendo pagos más rápidamente.
  • Ahorro de costes: Emitir facturas electrónicamente es más económico, lo que reduce los gastos operativos.
  • Promoción de la digitalización: Esta ley estimula la adopción de tecnologías digitales, impulsando la transformación digital empresarial.
  • Beneficios ambientales: Al reducir el uso de papel, se disminuye la huella de carbono.
  • Simplificación fiscal: Facilita la presentación de declaraciones fiscales al hacer más sencilla la recopilación y archivo de facturas.

 

Para cumplir con la ley, las facturas electrónicas deben estar en formatos válidos como XML CII, UBL, EDIFACT o Facturae, y deben ser firmadas electrónicamente. Además, deben enviarse a través de Puntos Generales de Entrada de Facturas Electrónicas, con la autenticidad e integridad del contenido verificables a través de firma electrónica avanzada o intercambio electrónico de datos (EDI), asegurando la confianza y seguridad en el proceso de facturación.

 

 

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *